
EL RETO DE SER MAMA Y A LA VEZ NO DEJAR DE SER MUJER
BY: Vanessa Vera
¿Como mantener ambos roles y no morir en el intento?
La maternidad puede significar un choque muy fuerte cuando en realidad la afrontamos y puede distanciarse un poco de la creencia de que ‘todo es color de rosa”, lejos de todas las cosas hermosas que se viven en ella también hay una parte absorbente de la que pareciera que no muchas se atreven hablar por el temor a ser señaladas como “malas madres”. Pero se necesitan de varias claves para atravesar esta etapa y no perder el rol de ser mujer siendo madre.
Hoy quiero compartirte 4 Claves importantes que pueden sumar a tu proceso y con ellas preguntas para orientarte mejor respecto a cada escenario.
EQUILIBRIO: ¿Me siento abrumada en la crianza?
Necesitamos un espacio de tiempo personal; por muy mínimo que sea, puedes comenzar por hacer respetar tu espacio en el baño a solas sin que nadie te moleste, es una manera de desahogo y también de enseñarle a nuestros hijos que todos tenemos un espacio que necesita ser respetado.
Necesitamos sentir, cuando somos mamas parece que esto pasa a un 4to plano y no recordamos la última vez que tuvimos el derecho a experimentar cansancio, que necesitamos respirar conscientemente o que simplemente hablaste acerca de tus sentimientos y te sentiste validada respecto a tus emociones.
“TENER UN HIJO NO DEBERIA INVALIDAR TU SER PERSONA, POR EL CONTRARIO, DEBERIA ENRIQUECERLO”
Necesitamos ser humildes, una de las virtudes del equilibrio es aprender humildad y siendo madres nos arropa un espíritu de superhéroe donde pareciéramos estar convencidas de que “si definitivamente sabemos todo y podemos con todo”, esto esta apartado de la realidad y la manera de romperlo es siendo humildes que no es más que aprender a decir a nuestros hijos: “perdóname, me equivoque, te ataque cuando debí preguntarte antes hij@” y una de las más importante y a la vez difíciles “hij@ en este momento no se responderte eso, la verdad no sé qué decirte”
A la hora de buscar el equilibrio es natural que nos ataque el perfeccionismo y la autoexigencia, lo que no nos permite confiar en el ser persona de nuestros hijos, aprender a validar también lo que ellos sienten y las posibles conclusiones que ellos tienen acerca de una situación también me permitirá equilibrar las cargas y no llevar sola el peso de dar todas las respuestas o directrices, te aseguro que si has hecho un buen trabajo te sentirás orgullosa de ver como tus hijos pueden tomar buenas decisiones y demostrar lo que les has enseñado.
EL TIEMPO ¿Siento avance y madurez en mis hijos?
Si tu respuesta es positiva sigue así estás haciendo un buen trabajo!
Si tu respuesta es contraria, reflexionar es clave y tomar acción lo antes posible, confía en tu intuición y busca ayuda si no cuentas con las herramientas necesarias para implementar valores y estructura que te ayuden a avanzar y madurar con tus hijos en cada etapa.
Como mamá es inevitable tener que poner en pausa algunas metas que no concuerdan con toda la demanda que conlleva la crianza: pero amar es una decisión y cuando elegimos traer a un niño al mundo también tomamos una decisión.
«SIEMBRA TODO LO BUENO QUE PUEDAS EN TUS HIJOS, BESA, ABRAZA, DI QUE AMAS…JAMAS SERA EXCESIVO”
LA DISCIPLINA: ¿Si mis hijos no me escucharan, pero me vieran y me imitaran exactamente qué clase de persona serian? ¿Te gustaría esa persona en la que se convertirían?
Para nosotros: No podemos ser la última de la lista, cuando arribas en un avión las instrucciones en caso de emergencia dictan: “que te coloques tu primero la mascarilla y después asistas al niño que tienes al lado”, esto nos da una pauta super importante para entender este punto. Priorízate sin culpas, si mamá está a salvo, los demás estarán mejor.
Para ellos: Establecer rutinas, establecer horarios y estructura para los niños siempre será una ganancia para el adulto, una vez que ellos lo adopten tendrás un camino cada vez menos pesado respecto a la crianza porque se convertirá en seres independientes y capaces.
LA CULPA: Es un castigo que me doy y la única manera de afrontarla es “responsabilizarme” el lado oculto en la culpa es el espejo que me muestra mi hijo de mi niño interior no resuelto, cuando mi hijo hace algo que me molesta en exceso, necesito revisar ¿qué me está mostrando de mí, que es lo que yo no he resuelto, que se me sigue presentando de alguna manera? la culpa es pasado, detenerme en la culpa es desgastarme en un pasado que ya no puedo cambiar.
“Para minimizar la culpa necesito aprender a mirarme con responsabilidad y aplicar la empatía”